domingo, 3 de junio de 2018

Sombreverus.

¡Hola holita, Miguelitos!

¿Cómo vais esta semana? Nosotras bien. O sea, cansadas, como siempre, pero ¿cuándo no lo estamos? Es ya parte de nosotras. Sin embargo, estamos bien. ¿Y vosotros? Esperamos que estupendamente, que estéis comiendo mucho helado, dedicándonoslos a nuestra salud (seguro que todos esos helados que nos estáis dedicando son los culpables de mis granos. Malditos) (Yo preferiría que nos lo diérais en vez de que nos lo dedicárais... Manías mías). Y que estéis teniendo tiempo de hacer el vago. Hacer el vago debería ser un derecho constitucional, ya que permite cargar pilas ante la inevitable situación de volver a un mundo social.
¡Bueno! Vamos al tajo: hoy queremos compartir con vosotros una de esas cosas tan… perturbadoras que encontramos por los mundos de Internet. Si ya lleváis un tiempo con nosotras, debéis saberlo: nos gustan las cosas malas. Malas no en el sentido de pegar patadas a cachorritos y esquilar a abuelas (ji,ji,ji,ji,ji), malas en el sentido de leer escritos de escasa calidad sobre temas estrambóticos. He ahí la cuestión: ahí solemos entrar en el mundo de los fanfics (oh, ese maravilloso mundo).

Antes de nada, resaltar que probablemente haya muy buenos fics por el universo. De hecho, hemos encontrado alguno que vale mucho la pena. Pero dentro de ese mundillo, hay varias categorías: bueno, mediocre, malo, terrible, feoficAfter. Por razones desconocidas de la vida (nos gusta burlarnos de la peña y leer cosas que nos maten de risa a la vez que nos den una grima tremenda), aquí las Migueles somos asiduas a leer feofics, también llamados MIERDA JORO (que no es lo mismo que mierda normal): MIERDA JORO se reserva para cosas como Perla Shumajer (algún día os compartiremos todo lo que sabemos de ella, ¡oh, la grande, la maestra, la más genial entre las geniales escritoras de feofics!)… cosas perturbadoras en general… y eso. Os hacéis una idea.

En fin. Hace un tiempo encontramos una maravilla maravillosa por Internet, gracias a nuestra cuenta de Twitter de confianza en la que se publican fragmentos de fics perturbadoramente perturbadores. Y ahora os lo traemos en exclusiva con bombo y platillo.

Para vosotros, desde el más allá hasta el más acá, os presentamos: SOMBREVERUS.


Ese léxico, ese ritmo, esa adictiva trama que se presenta. Es una obra tal que no se puede pasar por alto, desde luego. ¡El uso del spaninglish fundido con una autoreferencia! ¿Acaso no es eso maravilloso? Además, estiran los labios para besarse. Un sombrero y un señor que no conoce exactamente cuál es el uso del champú. Si eso no es calidad, no sabemos lo que es. Luego encontramos este gif, que además, ilustra con maestría esta magnífica obra de la literatura universal. Nos parece completamente hipnótico.

Y luego que la salud mental está empeorando, ¡la salud mental es para los débiles! Nosotras preferimos pudrir nuestra mente con estas maravillas que la era de Internet nos brinda y gracias a las cuales una hasta puede llegar a perdonar la estupidez humana... solo un poquito, solo si es para hacernos reír así.

Y con esto y un bizcocho, nosotras nos comemos el bizcocho y vosotros a esperar a la semana que viene que no falta tanto. Ale, besitos de fresa para vosotros. Y, recordad, sea lo que sea lo que penséis sobre un fandom (o varios, porque también existe la maravilla de los crossover), por perturbador que esto sea, alguien ya lo habrá convertido en fanfic (Yo una vez leí un Severus X todos los teletubbies. Todavía no lo he superado).

Con mucho amor y brillis brillis
Camino y Marina

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