Días de mierda #4: La paradoja de la mandarina fantasma.

¡Hola holita, Miguelitos!

¿Qué tal os habéis portado en esta semana? ¿Bien, genial, fatal? Nosotras no hemos tenido queja. De vuestros comportamientos, queremos decir. De nuestras semanas siempre tenemos queja. Somos nosotras, después de todo. (Siempre podemos quejarnos. Hemos hecho de eso un arte).

En esta entrada, queridos Miguelitos, hemos querido acercaros a la mente de una de nuestras Migueles, Marina —o Muffie, como le gusta que la llamen— y a una de las anécdotas que prácticamente definió nuestros cuatro años de carrera: LA PARADOJA DE LA MANDARINA FANTASMA. (No me juzguéis, esto es un tema serio para mí).

Si no sabéis qué es esto, la brecha generacional que nos separa es más grande de lo que pensábamos.

Esto, aunque parece el nombre de una película de miedo o de ciencia ficción de coña, es el nombre que terminamos poniéndole a una situación recurrente y traumática en la vida de Marina (¡EL DRAMA DE MI VIDA!). Y es que las mandarinas pueden llegar a ser muy cabronas si se lo proponen y parece ser que las que siempre compraba aquí nuestra querida Miguel lo eran. La cosa, a grandes rasgos, se puede resumir de la siguiente manera:

Marina se mete una mandarina al bolsillo, Marina se come la mandarina, Marina no recuerda haberse comido su mandarina, Marina busca su mandarina en su bolsillo. 

Hasta aquí, puede ser un lapsus momentáneo mental muy común, pero cuando ocurre todos los días durante meses comienza a convertirse en un verdadero drama. (Marina claramente SE COMÍA LA MANDARINA. Venía oliendo a mandarina a clase. El problema es su cerebro, no la mandarina, pero shhhh). (Me comía una mandarina en casa y la otra la metía a mí bolsillo, pero daba igual si me comía o no la segunda, porque siempre sentía su presencia en mi bolsillo. ¡Mi bolsillo tenía forma de mandarina! ¡Aunque metiera la mano y ella no estuviera ahí! ¡Seguía teniendo su forma!).

La realidad de la situación, así como el desvarío posterior que un suceso como este puede traer consigo, se ve perfectamente plasmado en la siguiente conversación de WhatsApp que os traemos en exclusiva extraída de uno de los grupos de amigos en los que ambas Migueles estamos y en el que Marina quiso dejar constancia y testimonio escrito de que se había comido su mandarina en un vano intento por no acabar buscándola de nuevo en su bolsillo.

Agarraos: esta es una LARGUÍSIMA CONVERSACIÓN. (Que no tiene ningún desperdicio). Pero así podréis conocernos mejor y ver que no somos raras solo en este blog, sino también en la vida real. Y que nuestros amigos no nos repudian por ello, es más, nos dan cuerda. (Y, a veces incluso, nos piden matrimonio).

¡Dentro conversación!

[16/12 09:30] Muffie: Mensaje para yo de mí y para mí de yo: Muffie, te has comido la mandarina. TE LA HAS COMIDO. No se ha perdido, ni se ha volatilizado, ni te la han quitado, ni se ha caído, ni nada. Te la has comido. La has pelado, has ido separando gajo por gajo y te los has ido comiendo. Así de fácil, así de sencillo. Sin más.
Por favor, deja de buscar la maldita mandarina en tu bolsillo porque NO VA A ESTAR. Porque te la has comido. Eso ha pasado. No va a estar en tu bolsillo nunca más. Déjala ir. No volverá por mucho que rebusques una y otra vez en el bolsillo porque te la has comido. Créeme, esto es mucho más duro para mí que para ti.
Te la has comido. Ya. Punto y final. Deja de buscarla. No va a volver. Fin de la cuestión. No puedes comértela dos veces. Fin.
Espero que te haya quedado claro. Un saludo e intenta no sacar el corazón por la boca en clase de Cultura y Patrimonio cultural.
Fin del comunicado.
[16/12 09:36] Red: x'D
[16/12 10:18] Tak: 💕
[16/12 10:19] Tak: Por cosas como esa le pedí matrimonio.
[16/12 10:20] Muffie: ¿Por mi paranoia con mandarinas fantasma?
[16/12 10:22] Red: O por tu narración de los hechos para tu yo futuro.
[16/12 10:23-26] Muffie: Mi yo pasado me conoce bien. Sabe que al poco tiempo de comerme la mandarina voy a rebuscar en mi bolsillo confundida al no encontrarla. La paradoja de la mandarina fantasma, la llamamos. En serio, parece coña pero tengo un problema. Me pasa todos los fucking días. No es la primera vez que me dejo un mensaje a mí misma sobre esto. El anterior lo dejé en el wa de Camino, creo.
[16/12 10:27] Ali: ¿Se te olvida que te la comes justo después de comértela?
[16/12 10:28-29] Muffie: No es eso exactamente. Yo me como una mandarina en casa y luego me meto una al bolsillo. Y me la voy comiendo por el camino. Y luego me paso todo el viaje buscándola en el bolsillo. Y claro, yo recuerdo haberme comido una mandarina. Pero bien puede ser la primera de la mañana
[16/12 10:29] Camino: Sip. Recibí un hermoso mensaje por la mañana. Decía un «ME HE COMIDO LA MANDARINA POR EL CAMINO».
[16/12 10:29-30] Red: La solución es llevarse un melón. Así no hay duda posible de que has hecho con él.
[16/12 10:30] Muffie: Así que me paso el viaje rebuscando en mi bolsillo la mandarina que estoy segura que dejé ahí pero que nunca recuerdo haber comido exactamente.
[16/12 10:30] Camino: Sí se la come. Cuando llega a Moncloa huele a mandarina fresca. Ese olor de «me la he comido hace nada». Inconfundible.
[16/12 10:30-31] Muffie: Y ahora ya aunque sea totalmente consciente de que me la he comido, de forma subconsciente la sigo buscando en el bolsillo. Es un drama para mí.
[16/12 10:33] Ali‬: Estoy sola y aburrida hasta las 14:30 :(
[16/12 10:34] Muffie: Come mandarinas. Es una fiesta.
[16/12 10:34] Camino: Después olvídate de que las comiste. E ignora ese inconfundible olor a mandarina fresca.
[16/12 10:34] Muffie: Ahí esta la verdadera fiesta.
[16/12 10:35] Camino: (Porque ahora apestas a mandarina).
[16/12 10:35] Tak: 🍊 Muff-senpai, ya nunca volveremos a vernos… Es que… Es que… He decidido unirme al ejército. Adiós.
🍊
👔
El cadete mandarina nunca llegó lejos. Su nombre y orígenes no tenían nada de especial. No ascendió en la cadena de mando y un día, durante un entrenamiento con tanques, se pilló la camisa en las ruedas de su vehículo. Hoy se le conoce como cadete zumo de mandarina.
[16/12 10:35-37] Muffie: 😱😱😱😱😱😱😱😱😱😱😱😱😱😱😱😱😱😱😱😱
¡¡¡¡¡MANDARINA-KUN!!!!! (Además de fantasma, patético. Me tocan los peores kohais).
[16/12 10:38] Red: x"D
[16/12 10:38] Tak: Claro. Para que te intereses mas por el narrador 😏
[16/12 10:38-39] Muffie: 😏😏😏😏😏 Tak~~ Hace mucho que no te pido matrimonio💍💎
[16/12 10:39-40] Tak: 😍 Oh, Dios mío. ¡¡Lops, chúpate esa!! 🙉 👘
[16/12 10:40] Muffie: Adoptaremos a la mandarina.
[16/12 10:40] Tak: Y nos la comeremos.
[16/12 10:40] Red: Canibalismo infantil.
[16/12 10:41] Tak: E iremos a la cárcel.
[16/12 10:41] Red: Fascinante o:
[16/12 10:41] Muffie: Y nos olvidaremos de que lo hemos hecho y adoptaremos a otra. Y así sucesivamente.
[16/12 10:41] Tak: Síiii 😍
[16/12 10:41] Red: Y además en serie.
[16/12 10:41] Tak: 🍊💕
[16/12 10:42] Camino: Eso es una historia de amor y lo demás son paparruchas. Me he emocionado *se seca una lágrima*.
[16/12 10:42] Muffie: El drama romántico mandarinesco del siglo.
[16/12 10:44] Camino: La historia que emocionó a Spielberg.
[16/12 10:44] Muffie: Vive el drama de las mandarinas fantasmas y la terrible historia de amor prohibido entre dos caníbales infantiles y el impedimento que la sociedad les pone para adoptar más mandarinas.
[16/12 10:45] Tak: ¿¿Dónde estan los de jolibú pidiéndonos comprar los derechos??
[16/12 10:46] Muffie: Es que como no tiene coches y tetas ya no les interesa.
[16/12 10:46] Tak: 😡
[16/12 10:46] Muffie: Las mandarinas ya no están de moda.
[16/12 10:46] Camino: Las mandarinas pueden ser una simbología de pechos.
[16/12 10:46-47] Tak: ¡¡¡Pues se meten!!! ¡¡ Joe, tiene un tanque!! Metemos tanques y rifles y ya está.
[16/12 10:47] Muffie: Podemos ambientarla en un mundo distópico. Eso siempre da puntos.
[16/12 10:47] Camino: Si metéis a un inspector que investigue la desaparición y posterior aparición de cadáveres de mandarinas, lo petáis.
[16/12 10:48] Tak: 😍 Yasss. El inspector Caranaranja, el padre biológico de la primera mandarina.
[16/12 10:48] Camino: Omg, encima motivos personales. Magnífico.
[16/12 10:48] Tak:
🍊
👔
hijito… sniffffff.
[16/12 10:49] Muffie: La historia se escribe sola.
[16/12 10:49-51] Camino: «Estremecedor. Abrumador. Piel de gallina garantizada». Le Times.
«Nunca una historia sobre mandarinas emocionó a tanta gente». Le Fígaro.
«Perturbadoramente adictivo». El Mundo.
[16/12 10:51] Red: «A mí me ha molao'». Alguien.
«Deliciosa». Un vegano.

[16/12 10:52] Camino: xDDD
[16/12 10:52] Tak: ¿Piel de gallina? No, no, ¡dará piel de naranja a quien la vea!
[16/12 10:54] Camino: Jajajajajajajajaj.
[16/12 10:55] Muffie: Ahora tengo ganas de leerla.
[16/12 11:01] Camino: También lo veo como el próximo super ventas.
[16/12 11:07] Red: Nectarífero.
[16/12 11:12] Kanon: YOU THOUGHT IT WAS MANDARINA, BUT IT WAS ME, MUFF!!
[16/12 11:13-14] Tak: ¿¿¿¿MUFF ERA LA MANDARINA TODO EL RATO???? ¿O le robó su primer beso a la mandarina? 🙊
[16/12 11:14] Red: Ríete, pero yo todas las mañanas pienso que habla de sí misma y que se busca en los bolsillos. Porque leo Marina. No mandarina x'D
[16/12 11:15] Tak: Lool. Qué revelación. Sus nombres se parecen. Aquí hay algo turbio.
[16/12 11:20] Muffie: Confieso. Yo era la mandarina en todo momento. Por eso no conseguía encontrarme en el bolsillo. De ahí viene lo de paradoja en el nombre de «La paradoja de la mandarina fantasma».
[16/12 11:21] Red: Es un buen giro de la historia.
[16/12 11:21] Kanon: «La metamorfosis de Muff». Dentro de unos años saldrá en los libros de filosofía.
[16/12 11:21] Camino: CHAN CHAN CHAAAAAANNN.
[16/12 11:21] Red: Sustituirá a la de Kafka.
[16/12 11:21] Kanon: «En mí mismo la mandarina no soy». Platón.
[16/12 11:22] Camino: Reescribamos la historia de Kafka. Seguro que vende más que la de la cucaracha.
[16/12 11:22] Red: Suena más apetitosa. Eso seguro.
[16/12 11:23] Camino: Las mandarinas son mejores para vender. Una cucaracha no es tan susceptible de ser merchandising.
[16/12 11:25] Muffie: Muff la mandarina Marina. Suena como a demasiadas M's.
[16/12 11:25] Red: Muy Mary Msu.
[16/12 11:26] Tak: ¡Perfecto! ✨Y ahora me iré y… os volveré a hacer casito después del examen.
[16/12 11:26] Red: ✨
[16/12 11:27] Muffie: Suerte! ¡Que la mandarina te acompañe!
Y que no desaparezca de tu bolsillo D:

Y eso es todo. Sí, es un testamento al completo, pero ¿y lo entretenido que es, eh? Hemos decidido meter esto en DÍA DE MIERDA, ya que, a pesar de que la conversación es absurda, el drama que vivía Marina cada día y que Camino sufría con resignación fue muy real. Demasiado real. Cosas tan cotidianas como las mandarinas pueden convertirse en los desencadenantes de días de mierda [y que después tuviéramos clase de Cultura y Patrimonio cultural no ayuda. Esa clase era lo puto peor. La profe nos tenía enfiladas (Seguro que era ella quien hacía desaparecer la mandarina del bolsillo de Marina y luego la inculpaba) (¡GASP!)].

Así que ya sabéis Miguelitos, las mandarinas no son un juego. De hecho, nosotras nos andaríamos con cuidado si fuéramos vosotros. No os dejéis engañar por su apariencia inofensiva y papel no oficial de naranjas bebé. Las mandarinas traman algo. Nos observan, nos vigilan, nos confunden desapareciendo de nuestros bolsillos o haciéndonos pensar que han sido comidas por el aparente olor a mandarina fresca. La realidad es que quieren acabar con nosotros y usurpar nuestra identidad. Así que ya sabéis, la próxima vez que os crucéis con una mandarina no dudéis, comeosla rápidamente, porque si dudáis aunque solo sea un segundo... los devorados podéis ser vosotros.

Con mucho amor y brillis brillis

Camino y Marina Mandarina